lunes, 12 de septiembre de 2011

El faro doble

José Manuel L. P.

El Cabo de Touriñán, y no Finisterre, es el punto más occidental de España y uno de los sitios que más me gustan de Galicia. Siempre que alguien me dice que va a ir a la Costa de la Muerte, insisto en que no deje de ir a Touriñán o no podrá decir que ha estado en el finis terrae. El último que recibió el aviso fue José Manuel y me ha mandado la prueba de que él sí ha estado allí, en ese paraje inhóspito y agreste donde el mar bate con fuerza contra el acantilado.

Touriñán tiene dos faros, el primero, la linterna que corona el pequeño edificio cuadrado que se ve en la foto, es de finales del siglo XIX pero era poco faro para una costa batida por grandes temporales y 80 años más tarde se levanto la torre de la izquierda. El pequeño faro no pudo evitar que en 1935, un barco alemán provocase el naufragio de un pesquero de la zona y tampoco que en curiosa coincidencia, y veintidos años más tarde, ese mismo barco, el Madeleine Reig, se hundiese en el mismo sitio.

Uno de los encantos que tiene ir a Touriñán es que no está ni la mitad de 'turisteado' que Finisterre que en los últimos años se ha convertido en un parque temático, con hotelito incluido, al que sólo le falta que pongan música chill out por unos altavoces a la caída del sol. Además, de camino, es inexcusable desviarse a la fantástica playa de Nemiña, paraíso de surferos, por sus grandes olas, y tristemente famosa porque fue una de las más afectadas por el desastre del Prestige aunque, felizmente, ya está recuperada.

4 comentarios:

Ana dijo...

Es muy bonita la foto no le conocía yo estas dotes al fotógrafo;-)

Lourdes dijo...

Mejor contemplar faros que detenerse en todas las miserias que traen los periódicos.

Qué cielo tan limpio para estar en la Costa de la Muerte, tu amigo tuvo muchísima suerte con el tiempo; yo, cada vez que he ido, sólo he visto nubes o lluvia y en una ocasión un temporal impresionante.

Elena dijo...

En Nemiña, hace veintitantos años, no era raro que tuvieses la playa para ti sola ¿Verdad, T? Y la peregrinación a Touriñan, con vosotras, era un clásico, sólo con los vientos que hemos pillado allí no se como no terminamos tronadas.

Carmen dijo...

¿ Dos naufragios? ¿ Un faro doble? ¿ No iria un poco pedo ese capitan?