PS/Acotar este misterio de la Fe es una pretensión que excede a mis conocimientos y, por supuesto, a la razón, pero si me gustaría decir que su libre decisión, su grandeza, fue vaciarse de sí misma y dejar que Dios la llenara.
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2 comentarios:
G,
“En el primero, mencionaban, según creo, Horton y Hooking, con temblor y estremecimiento, una espantosa blasfemia que habían encontrado en un místico católico hablando de la Santísima Virgen: "Todas las demás criaturas lo deben todo a Dios, pero a ella Dios mismo tiene que estarle agradecido". Yo, por el contrario, me estremecí como si overa un trompetazo y dije casi en alta voz: "¡ Qué magnífico es esto!". Me pareció como si el milagro de la encarnación, entendiendo bien al místico, apenas pudiera expresarse mejor ni más claramente.“
G.K.C
Un saludo estimada T,
¡Qué puedo yo añadir al gran Chesterton! Sólo agradecerle a usted que haya dejado aquí este pequeño gran texto.
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