De Mendelssohn se ha dicho que fue un hombre feliz, sin necesidades económicas ni complicaciones vitales y que eso se refleja en su música, por lo general alegre. De todas sus obras yo tengo debilidad por una, el Salmo 42 que precisamente se leía en la misa de ayer. Y aunque la versión que he encontrado no está entre mis favoritas, la dejo aquí para que disfruten.
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2 comentarios:
Es muy bonito y no lo conocía, lo que tampoco es nada raro porque conozco muy pocas cosas y todas bastante corrientitas.
En tu pueblo hay un temporal de la puñeta, que lo sepas.
Me alegra que te haya gustado, si la encuentro te regalaré mi versión favorita.
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